por Montse Arqué
Duelo de campeones el que se vivió ayer por la noche en la ciudad de Monterrey entre el conjunto local, los ‘Rayados’, y el cuadro estadounidense Real Salt Lake (2-2).
Sin duda, la final de esta edición de la Liga de Campeones de la Concacaf, a diferencia de otras, resulta ser más justa y pareja. Tenemos a los actuales campeones de la liga mexicana y de la MLS peleando por esa certificación que los convierta en el mejor club de la zona norteamericana y del Caribe.
Monterrey midió fuerzas y fue superior en este, el juego de ida. Un gol de Aldo de Nigris, quien por ciento llegó a cinco tantos en este certamen, adelantó a los locales y ratificó el dominio de ‘La Pandilla’.
Sin embargo, los fantasmas que han perseguido al conjunto regiomontano en el cierre del torneo local se hicieron presentes. Humberto Suazo, a pesar de ser el eje del equipo, no está pesando lo suficiente y la presión que tiene el equipo de no ganar en las últimas cuatro fechas del Clausura 2011 es más que evidente.
Para todos aquellos que aún creen que la MLS aún esta lejos de competir de manera seria con otras ligas, están muy equivocados.
Real Salt Lake, a pesar de no ser muy insistente, se supo plantar frente a Monterrey y supo aprovechar la única oportunidad clara que tuvieron en el juego. Nat Borches fue inteligente y aprovechó perfectamente el descuido de la zaga para emparejar las tarjetas. Ese gol le daba vida al visitante, pensando en el criterio de desempate.
En la segunda parte, cualquiera de los dos era capaz de hacer la diferencia y la oportunidad le llegó a Monterrey de la mano de ‘Chupete’ Suazo, gracias a una mano tonta dentro de su área por parte de Jamison Olave que se transformó en penal.
Ese tanto sirvió de inspiración para que Monterrey hiciera pesar su localía y aunque tuvo varias oportunidades de hacer un tanto más que les daría tranquilidad para el duelo de vuelta, le faltó capacidad para concretarlo.
Esa que sí tuvo Javier Morales en el último suspiro del partido y que puso en evidencia, una vez más, la falta de seguridad de la defensa de ‘Rayados’ y hasta cierto punto, lo ha dejado tendido en la lona.
Sólo queda esperar los últimos 90 minutos y ver si Monterrey puede remar contracorriente ante esos dos goles de visitante marcados por Real Salt Lake. La tarea no es sencilla, pues los dirigidos por Jason Kreis no conocen la derrota en su estadio, el Rio Tinto de Utah, desde el 16 de mayo de 2009.
Además, Víctor Manuel Vucetich tendrá que replantear la estrategia, pues ya sea por tarjetas y lesiones, pierde a tres jugadores clave: Luis Pérez, Aldo de Nigris y Jesús Zavala.
Simplemente, que gane el mejor…
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